La otra noche era demasiado tarde para comenzar
un nuevo proyecto de los que tenía en lista… pero demasiado pronto para dar de
mano. Lo cierto es que me gusta sentarme tranquilita en el sillón, cuando el
niño ya se ha acostado, tener algo entre las manos que coser o bordar y escuchar
la tele. Si escuchar, porque la verdad es que la miro poco.
Así que estaba yo “qué hago, qué hago… buhitos”
Y a ratitos muertos… colección de llaveros
No hay comentarios:
Publicar un comentario